Se encaró a los terroristas y no dejó de pelear por esclarecer los crímenes sin resolver
Fernando Altuna, el hijo del Capitán de la Policía Armada, de la Reserva General de Miranda de Ebro asesinado por la banda terrorista ETA en 1980, ha aparecido muerto en su casa esta mañana. Era un incansable luchador en contra del terrorismo y en defensa de los derechos de las víctimas.
Miembro de la Junta directiva de Covite peleó de manera incansable no sólo por esclarecer la verdad del asesinato de su padre sino también el de los casos sin resolver.
Su compromiso pasaba por recordar a todas las víctimas cada día, desde Twitter. Era una de sus contribuciones personales a la historia y al recuerdo.
En Covite fue el creador del “mapa del olvido”, una aplicación de la web que tiene el colectivo en la que mediante una búsqueda puedes encontrar el lugar, fecha y asesinato perpetrado por ETA.
Con 47 años, Altuna deja un hijo de 13 años, justo la edad en la que él se quedó sin padre. Y es que él no dejó de publicar artículos de su padre en los medios y no dejó de recordarlo.
Valiente y luchador incansable, fue uno de los miembros de Covite que acompañó a Consuelo Ordoñez en Alsasua en un “acto de rebeldía” y retaron entre cuatro a los abertzales en la misma plaza donde se concentraban organizaciones vinculadas a la izquierda abertzale para protestar contra la presencia de la Guardia Civil y los supuestos montajes policiales sobre la agresión a dos agentes y sus parejas.
También la noche del pasado sábado fue con otros miembros de Covite a colocar placas en recuerdo a las víctimas del terrorismo por las calles de San Sebastián. – FUENTE:
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